Orientada al diseño de jardines infantiles y salas cuna, la XI Versión del Concurso de Arquitectura Corma invitó a las universidades de todo Chile a diseñar un anteproyecto en madera, como "un estudio de las condiciones físicas del espacio para el aprendizaje preescolar en jardines infantiles y salas cuna para Chile".
La propuesta 'Casa Jardín' de los estudiantes Felipe Soto, Pablo Quinchagual, Angello Igor y Javier Saldivia (Universidad San Sebastián) se adjudicó el primer lugar de esta edición. Bajo la tutoría de los profesores Nicolas del Rio y Tomas Jacobsen, el equipo diseñó una cubierta reticulada diseñada por medio de una cercha, permitiendo adecuarse a cualquier emplazamiento y programa, según los autores.
Actualización: la presente versión del artículo cuenta con las láminas, la memoria y los créditos actualizados, por cortesía de los profesores guía del proyecto.
Memoria oficial [extracto]: nuestra propuesta propone la construcción de un gran volumen de perímetro uniforme y controlado, bajo la figura del galpón. Una cubierta de pendiente controlada a dos aguas, dibujan el perfil superior, mientras el perfil inferior es recortado por los niveles de suelo, evidenciados por el uso de rampas interiores. Existen solo dos volúmenes anexos, uno es el acceso al jardín remarcado por un marco reconocible y una estructura lucarna que cruza el volumen transversalmente, alimentando de luz natural el interior del proyecto. El centro del trabajo estuvo puesto en la revisión y propuesta de una cercha estructural expresiva.
El objeto central de la investigación se basó en hacer una revisión a la composición de la cercha estructural, elemento de fácil y rápida elaboración, además de composición seriable y prefabricable.
El resultado arrojado constituye un interesante aporte arquitectónico al espacio habitable. Esto es la rigidez de la cercha por medio de la repetición de los elementos verticales, lo que puestos de manera intensiva y con fijación por ambas caras de las horizontales, permite reemplazar el arriostramiento tradicionalmente asignado a diagonales. Este supuesto fue revisado con ingenieros en instancias de taller y apoyado por referentes internacionales que han explorado situaciones similares en condiciones sísmicas equivalentes.
El programa de Jardín Infantil y Sala Cuna fue analizado en profundidad para vincular la arquitectura a un usuario particular; niños, profesoras y padres. Dentro de los temas fundamentales esta la seguridad como condición primaria para generar la confianza necesaria de los padres y establecido en gran medida por la normativa, pero más aún la búsqueda fue propiciada desde la idea de un espacio favorable al juego y la exploración de los niños.
Con esto se concluye de que el espacio debe aportar más de una situación, más de una experiencia, donde los niños puedan reconocer su lugar propio y a la vez motivarse por descubrir el siguiente. Este valor motivo la ubicación de las cuatro salas de manera autónoma pero ordenada en una grilla ortogonal. La autonomía de cada sala permitió diferenciar dos niveles distintos para la zona de jardín (niños mayores con movibilidad) de la zona de sala cuna (niños menores con desplazamiento controlado). Se opta por poner la sala cuna en una altura mayor, ya que de esta manera se logra un mayor control visual del patio, pero no necesariamente de salida libre.
En el eje de acceso se organiza la zona administrativa y de encuentro con los padres, además de las salas multiuso, para permitir la multifuncionalidad. Todo el espacio se organiza en torno a un patio central cubierto, el que funciona como centro y distribución de circulaciones, ubicado en el nivel más bajo del edificio.
Arquitectos
Felipe Soto, Pablo Quinchagual, Javier Saldivia, Angello IgorUbicación
ChilePremio
Primer LugarProfesores guía
Nicolas del Rio, Tomas JacobsenInstitución
Universidad San SebastiánAño Proyecto
2016Fotografías
Cortesía de Equipo Primer Lugar